La razón es muy simple: estos cereales no son para los seres humanos. Bueno, no directamente, ya que servirá para alimentar al ganado.
¿Cuál es la situación mundial en términos de consumo de carne?
La ganadería acapara el 60% de la producción mundial de cereales, o sea, 670 millones de toneladas. Un volumen de producción que bastaría para cubrir las necesidades alimentarias de los cientos de millones de personas que sufren de malnutrición.Si los cereales utilizados para el ganado en EE.UU. se consumiesen directamente, se podría alimentar a 800 millones de personas.
En una granja de engorde de EE.UU, ¡se distribuyen cada hora más de 25 toneladas de maíz a los 37.000 animales del ganado!
En 1985, durante la hambruna en Etiopía, cuando la población se moría de hambre, este país seguía exportando cereales para alimentar al ganado británico.
Debido a su alto consumo de harina de pescado, el 60% de la industria de la carne occidental se ha apoderado de los recursos pesqueros de Chile y Perú, mientras que cada año, entre 1980 y 1985, murieron 48.000 niños chilenos y 90.000 niños peruanos a causa de la malnutrición.
La explosión del consumo de carne empezó en la posguerra, cuando la población quiso comer carne en grandes cantidades porque había sufrido de hambre durante la guerra. Es un fenómeno paralelo a la distribución de fertilizantes y de plaguicidas sintéticos, por eso, los estados han invertido mucho en la genética, los tratamientos médicos y, finalmente, han creado granjas industriales donde el ganado traga antibióticos, hormonas de crecimiento y alimentos transgénicos.